Buscan crear conciencia para evitar la caza furtiva de cocodrilos
Eden Gómez Bernal
Una de las principales características que se mantienen en Chiapas, es la diversidad que se encuentra con respecto a la flora y a la fauna, por lo que se han buscado alternativas para con ello conservarlas y evitar el daño a las mismas.
En este sentido, un emblema de la entidad es el cocodrilo, un animal que se encuentra en varias zonas, por lo que se ha buscado crear conciencia en la sociedad de lo importante que es conservarlo, así lo refiere Edgar Sarmiento Marina, Técnico Superior de la Reserva de la Biosfera la Encrucijada.
Y es que dijo que actualmente se mantiene un trabajo en conjunto con la Facultad de Ciencias Biológicas de la Unicach, para poder alcanzar el bioético y tener un mayor y positivo impacto en la conservación.
El especialista explicó que en Chiapas existen tres especies las cuáles a la fecha su población se recuperó y es estable, esto a pesar de que aún existe la cacería ilegal.
«La importancia ecológica en ellos es vital porque de hecho es parte de la cadena alimenticia y esa es la parte más alta que si quitamos ese eslabón puede que el ecosistema de carga o se declina como son controladores biológicos puede que alguna especie pueda crecer más y formarse alguna plaga y desequilibrar el ecosistema ellos son los controladores de cuestiones biológicas que mantienen a la población estable».
Dijo que lamentablemente el tema del clandestinaje ha sido algo que golpea a las diversas especies, principalmente con el cocodrilo, por sus componentes, teniendo ganancias que arrancan desde los 300 pesos, hasta cantidades arriba de los 3 mil, dependiendo que es lo que se adquiera.
Explicó que, con el trabajo en conjunto con escuelas, y diversos sectores se busca mejorar la conciencia y se han tenido buenos resultados, por lo que actualmente se tiene una estabilidad en cuanto a la conservación de dichas especies.
Finalmente agregó que en la entidad se han registrado ataques por cocodrilos, pero se deben a que estos han sido provocados antes por los humanos quienes desconocen que son un especie silvestre y depredadores naturales que ante un ataque ellos suelen responder, por lo que es también necesario que la población respete a la especie, no atacándola ni cazándola.